Al ir al cine o a un casting, usualmente veo a la mujer de más de 50 años relegadas a personajes de soporte... pero mientras me hacia consciente de eso, también lo hacía en mí una necesidad de contar cosas que estaba viviendo en el momento… cambios físicos y mentales propios de mi edad. Y entonces, empecé a hacer una recopilaciones de anécdotas, tanto mías como de mis mujeres (amigas y familiares) que están en la misma situación o que ya las vivieron.
El divorcio es muy mal visto, es como un fracaso, se alejan los amigos que estan casados, o enseguida te quieren buscar pareja. Es como si esa fuera tu principal funcion en la vida, cuidar de la familia.
Con los cambios que suceden en nosotras después de que los hijos se van, el divorcio o enviudar. (¿que va a pasar ahora? ¿A quien vamos a cuidar?) descubrí que acontece una especie de despertar hacia dentro, para algunas de nosotras puede ser algo bonito, pero para otras, pueder ser horroroso. Es como un segundo estado de adolescencia, pero con otra connotación, es como un despertar de conciencia, un darse cuenta de que ya no somos las mismas, que hemos vivido más de los que nos queda, es una urgencia, un reinventarse.
Sé que este proceso es difícil, doloroso, momentos de negación y miedos, hay muchas piedras en el camino hacia el cambio interno. Algunas veces auto sabotajes, otras conductas heredadas que las damos como verdades absolutas, entre muchas otras cosas individuales.
Estoy viviendo ese momento importante de liberación, he visto por mis mujeres que es un tema que casi no se habla entre nosotras, quisiera poder hablarles de una forma jocosa, un tema tan serio, que nos veamos reflejadas, que seamos visibles y que ahora, con todo lo que hemos aprendido con el paso de los años, seamos más sabias, fuertes y libres que nunca.